El club de las mujeres muertas
A las que se rebelan, no se callan
Las humildes y las mansas
Las que imaginan cosas imposibles
El derecho a ser felices
A las que viven solas pisoteadas
Las que ya no esperan nada
A las desamparadas olvidadas
A las que caen y se levantan
Cuantas vidas humilladas
Cuantas lágrimas calladas
Lo más triste es la tristeza
En el club de las mujeres muertas
A veces porque miran, porque callan
Porque piensan se delatan
A veces porque cuentan, por que lloran
O porque no entienden nada
Hay quien perdona todo a quien las mata
Por un beso, una mirada
Hay quien lo espera todo, de quien aman
Y no pierden la esperanza
Cuantas vidas humilladas...
Quemadas, arrastradas por los pelos
Torturadas, devastadas
Violadas legalmente, apuñaladas
Algún juez las mira y pasa
Dicen que tienen celos y se nublan
Que no saben lo que hicieron
Y cuando beben dicen no ser ellos
Yo soy yo más este infierno
Cuantas vidas humilladas...