Cántaro yo
Marcaba yo las seis y media
En mi viejo reloj desde hace un mes
O dos o tres
Y, al verte Inés, esa tragedia
Se me remedia
Y en mi viejo reloj marco las doce
Tanto es mi goce
Al verte, Inés
Sin brindar por tus frescas emociones
Sin beber en la fiesta de tu piel
Me salían resecas mis canciones
Parecían las Tablas de Daimiel
Sin mojarme en tus besos de pantera
Sin sorber los susurros de tu voz
No sentía mi sed como algo atroz
Y al verte vi que sí lo era
Hola, Inés, son las doce, bienvenida
Hazme un sitio en tu oasis protector
Refréscame, y refréscame en seguida
Vámonos a la ducha, ven, mi amor
Y después a la cama, ya sin prisas
A enredarnos despacio en el placer
Y en las sonrisas del anochecer
Y amanecer y más sonrisas
Porque a las seis y media yo cantaba
Ejercicios de contabilidad
Cumplía mi función, no me encantaba
Me decía: son gajes de la edad
Aquí estás tú, mi musa intermitente
Y ya ves, yo encantado en mi quehacer
De volver a cantarte hoy tal que ayer
Cántaro yo si tú la fuente