El Fantasma
Hay un castillo en España
al cual sólo ruinas le quedan en pie,
y se cuenta que ronda por él
un fantasma más grande que un buey.
Ante tan negra leyenda
cualquiera que tenga sentido común,
a deshoras escapa veloz,
o el gigante lo pesca, y ¡adiós!
No hay turistas nocturnos allí,
mas a media noche de un viernes yo fuí ...
Apareció en un rincón.
Taca taca tín,
dándole al tacón,
chiquilicuatro y pelón,
era bailarín
de lo más chambón.
Pero sin volúmen para horrorizar
resulto fantasma de publicidad!
Viendo mi ceño fruncido
aquel mequetrefe me hizo notar
cinco siglos de tal soledad
que aburrido le dió por bailar.
Jura que en tiempos de Moros
él era un gigante terrible de ver,
más la dieta lo hizo encoger
(en las ruinas no hay que comer).
Solicita con gran humildad
otras viejas ruinas de más calidad ...
Hay que esperar la ocasión
Taca taca tín,
siguele al tacón,
aunque como bailarín
taca taca tá
no será mejor.
¡Pero en chimoltretas de imaginación
eso de fantasmas aquí terminó!