La azotea
Llego a casa embrutecido
Hace días siento que no doy más
Llego a casa empobrecido
El trabajo es algo digno de odiar
Subo el alma a la azotea
Para que esté libre y pueda jugar
La ropa de la vecina
Cuelga y mira para acá
Son los guantes de su cuerpo
Que me quieren agarrar
Embolsados por la brisa
Me quieren acariciar
Llego a casa tristecido
Hace cientos días que no doy más
Vuelvo a casa y nadie he sido
El trabajo dejo dije no puedo más
Subo el alma a la azotea
Para que esté libre y pueda jugar
La ropa de la vecina
Tiembla y mira para acá
Las viejas de la cuadra
Las manos por visera
Están anonadadas
Cuchilleando en la vereda
Aplicando la edad